GAME OVER, o cuando no hay botón de reset

GAME OVER (Taika, 2021) es una antología escrita por Eduardo Graells-Garrido, escritor, profesor e investigador en Ciencias de la Computación y editor de la editorial chilena Trazos de Aves. En sus nueve historias, recorre cómo el juego tiene poder sobre nuestras vidas y como, al final de estas, «puede que haya, o no, un botón de reset».

PRESS START: Sobre el Chile de los 90

GAME OVER, en sus relatos, mezcla géneros y narrativas, pasando por la no ficción, la autoficción y la ficción como tal, representando diversas formas en cómo los juegos se interrelacionan con la vida.

En primera instancia, nos muestra, en una especie de diccionario, distintas palabras y personajes que tienen lugar en la realidad. Nos da un contexto de los Entretenimientos Diana, de sus visitantes, de los juegos, del sistema, del ambiente, de la cultura.

Nos adentra en el mundo de los arcade, de los flippers y otros juegos de los Diana, de su jerga, de los/as racers, los/as dancers, los/as fighters; pero también del Chile de los noventa y los dos mil. Del machismo que había en los espacios, de las personalidades y vidas de la gente que los visitaba, y de cómo, incluso, llegaron a compartir espacios con agresores que saldrían en las noticias un par de años después.

«Me giré y, bajo ellos, encontré su mirada severa que tantas veces volvería a ver en el futuro. Me retó. Dijo que estaban preocupados por mi atraso, que los flippers eran peligrosos (esa palabra utilizó: flippers)».

Página 30.

Y es que con sólo esa oración, el autor reflejó lo que muchos adultos pensaron con la aparición de los arcade: que eran un peligro.

GENTLEMEN START YOUR ENGINES

Pero, a pesar de los prejuicios, los juegos continuaron evolucionando. La pregunta es: ¿hasta cuándo?

En ese sentido, GAME OVER nos presenta juegos tradicionales y clásicos, como elevar volantines o una partida de ajedrez, hasta unos que podríamos ver, quizá, en un futuro distópico (o quizá en unas cuántas décadas más): una batalla hasta la muerte entre robots y humanos.

El autor juega con la ficción añadiéndole tintes de problemáticas sociales a cada uno de sus relatos, lo que hace que cada texto sea sorprendente, cotidiano y, a pesar de la evolución tecnológica, humano. Siempre volvemos al sentir, a la emocionalidad.

Pues a pesar de tener notas de ciencia ficción, el amor, el cariño, la familia y la resiliencia no se quedan atrás.

«Cuando Alfonso lanzó ese volantín al cielo, una alegría infantil desbordó el corazón del joven, con lo que resurgió la adolescencia que había sido enterrada a balazos».

Página 67.

Con frases cortas, pero directas, alude a distintas realidades de la sociedad chilena -extrapolables a cualquier realidad similar-, mostrándonos a una humanidad vulnerada en las distintas etapas de su vida, ya sea en el ámbito social, laboral e, incluso, médico.

«¡Hemos roto el récord de audiencia! Tal como acordamos, aquí está su váucher para ingresar a la Clínica FutureMedic. Sus sesiones de quimioterapia lo están esperando. ¡Buena suerte!»

Página 101.

Como se mencionó anteriormente, el machismo y la crítica social está muy presente en los relatos, pudiendo evidenciarla en distintas etapas:

Desde el pensamiento de la época en los espacios de los Entretenimientos Diana:

«Los juegos de pelea estaban dominados por hombres y las pocas mujeres que se veían eran pololas de algún jugador, quienes usualmente no se involucraban en los duelos. Cuando una de ellas jugaba, nadie metía una ficha para combatir».

Hasta en la educación:

«No fueron las malas notas las que la alejaron de la universidad, sino lo que le decían:

– Eres buena programando. Veo tu código y no se nota que eres mujer.

– ¿Para qué viene a clases si después se puede casar con un ingeniero o un médico?».

Página 40.

Son pequeños detalles los que hacen pasar a un/a lector/a activo/a del relato a la realidad.

GAME OVER OR RESET

Lo dinámico de los juegos es que usualmente cuando pierdes puedes comenzar de nuevo. El tópico de perder, ganar o «pasar de nivel» es constante en los relatos, no de forma textual, pero sí en sus inicios y finales.

Nos presenta un reset constante que no necesariamente es la mejor opción y un Game Over que puede significar la muerte, pero también hay esperanza.

Algo destacable de la antología es que el autor no abandona a todos sus personajes, por lo que podemos ver la evolución de un par de ellos en otros relatos y correlacionar los textos aunque se puedan leer de forma independiente, lo que provoca generar empatía y cariño por los mismos. Los conocemos, sabemos su pasado, supimos su presente y sabremos su futuro.

Game Over es un libro que ve la influencia de los juegos en nuestra vida como seres sociales, pero que también nos posiciona actividades de la vida y ella misma como un juego. Desde hablar con alguien o bailar con nuestra pareja, hasta cómo podemos perder la vida en una ruleta rusa.

Porque al fin y al cabo, todos tenemos nuestras barajas de cartas, eventos inesperados y personajes secundarios.

Si te interesó el libro, te invitamos a descubrir «La muerte en colores» de Carlos Rendón.